Pues yo me he colado, y ayer 23 de agosto, con 35º de temperatura en Madrid, me armé de lapiceros y me bajé a dar una vuelta por el barrio de la Morería a buscar vestigios de los primeros pobladores de la capital.
Cogí el relevo de Javier en los jardines del Príncipe de Anglona, y tiré por la calle Alamillo y luego Morería para llegar finalmente a la Angosta de los Mancebos, donde se encontraron restos del
primer poblado de Madrid.
La verdad es que no se ve nada, no sé si las vallas tendrán algo que ver con el asunto, o las moscas, o que no hubiera ni un alma; y la casa es bastante feucha, pero fue curioso saber que ahí debajo vivieron gentes hace 3500 años.
Continué caminando por la calle Mancebos hasta que, al cruzar con Redondilla, me mostró el siguiente panorama
Quedaban estupendas las banderitas, pero no encontré a nadie para preguntarle de qué se trataba, y todos los locales de la calle estaban cerrados ¡si es que a quién se le ocurre ir a dibujar en agosto!
Continué por la calle Mancebos para visitar uno de los restos de la muralla medieval
al que tienen ahí encerrado detrás de una verja, una combinación de edificios bastante curiosa.
Y por último, por completitud, decidí pasarme por la calle del Almendro donde tienen otro trozo de la misma muralla
He de reconocer que no fui capaz de reconocer la muralla, que el espacio tras la verja es un caótico desastre, y que me gustaron mucho las 3 chimeneas.
Y aquí termino mi caluroso paseo y paso el testigo a alguien con más sentido común :-)
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