Estas escuelas se deben a la iniciativa del filántropo conquense
Lucas Aguirre y Juárez que a su muerte, en 1873, legó parte de su fortuna para el sostenimiento de centros educativos. Gracias a este legado se construyeron las Escuelas Aguirre de Madrid, además de las de Cuenca (hoy Centro Cultural Aguirre) y Siones (Burgos), localidad de nacimiento de su padre; en unos terrenos cedidos por el Ayuntamiento en la calle de Alcalá, 62.
Se pagó la construcción del edificio, el equipamiento, los sueldos de los maestros, médico, conserje… etc. La enseñanza era gratuita. Pronto adquirieron renombre y cumplieron una importante misión en una época escasa de escuelas.
El edificio es una joya arquitectónica del estilo neomudéjar del arquitecto Emilio Rodríguez Ayuso, quien lo concibió como un edificio exento de dos plantas capaz de albergar espacios educativos de una gran innovación para la época como gimnasio, biblioteca, museo escolar, patio de recreo, sala de música, e incluso un observatorio meteorológico que se situaría en la torre del edificio.
Su estilo es netamente neomudéjar, usando el ladrillo como elemento estructural y compositivo (utilización decorativa a base del juego de verdugadas en la pared con motivos de lazos, rombos, dientes de sierra...)
Fue levantado en
1881 e inaugurado en 1886.
Sus primeros alumnos fueron niños de 2 clases de párvulos.
En 1911 pasaron a depender directamente del Ayuntamiento de Madrid.
En 1967 se comenzó a construir un centro escolar que se llamaría "Nuevas Escuelas Aguirre", en la calle Pío Baroja, nº 4 en 1971 se inauguró estas escuelas con el nombre de "
Colegio Nacional Aguirre". El colegio era mixto pero no funcionaba como coeducación, funcionando con Maestros Municipales y Maestros Nacionales, seleccionados mediante concurso de méritos por el propio Patronato. En 1972 pasó a ser Estatal.
Hoy día ya no se dedica a la enseñanza, en ella se han ubicado sucesivamente la sección de estadística del Ayuntamiento de Madrid y, desde 2006, la
Casa Árabe.
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